La Asociación de Periodistas de Aragón se solidariza con los trabajadores de CHIP Audiovisual, productora que provee de contenidos a la televisión autonómica. Los bajos salarios, la precariedad y la ausencia de derechos laborales básicos son el origen de una movilización que hoy, lunes, ya se ha dejado ver ante la sede la Corporación Aragonesa de Radio-Televisión (CARTV), donde se ha concentrado la plantilla de CHIP. Esta manifestación se repetirá mañana, entre dos y media y tres de la tarde (hora del noticiario de sobremesa). El miércoles y jueves, las concentraciones tendrán lugar, respectivamente, ante el edificio de Heraldo de Aragón (copropietario de la productora), en el paseo de la Independencia de Zaragoza, y ante las Cortes de Aragón.
Los trabajadores de CHIP sólo reivindican un aumento salarial similar al de sus compañeros adscritos a la plantilla de Aragón TV. Pretenden dejar atrás años de congelación de facto de sus bajos sueldos. Asimismo piden alguna compensación por su actividad en fin de semana y otros detalles elementales, pero muy importante para ellos. El Comité de Empresa explica sus razones y peticiones en esta nota de prensa; así como sus próximas movilizaciones.
La APA apoya plenamente estas reivindicaciones. La Asociación de Periodistas, al igual que la Federación Española, se ha pronunciado en innumerables ocasiones contra las pésimas condiciones de trabajo que se dan en demasiadas empresas de la comunicación. En el caso de CHIP y otras productoras, esta circunstancia se produce con el agravante de que la productora tiene como cliente a la televisión pública aragonesa. En buena lógica, ese contrato de externalización por cuenta del erario debería incluir cláusulas específicas que protegiesen los intereses elementales de los periodistas y del resto de empleados de la concesionaria.
Desde la APA llamamos a los periodistas y a los trabajadores de la información aragoneses a manifestar por todos los medios su solidaridad con las/os compañeras/os de CHIP audiovisual. Asimismo, solicitamos de los grupos parlamentarios de las Cortes aragonesas y del propio Gobierno de Aragón una intervención eficaz para resolver este conflicto. Los medios públicos aragoneses deben ser un ejemplo para el sector. Empezando por su relación, aunque sea a través de empresas externas, con quienes elaboran sus contenidos.
