L.CELMA
El proyecto AB-Bilgi contará con la participación de la periodista aragonesa Melania Bentué. La especialista en información sanitaria se encargará de su difusión en España, en la Unión Europea y en Turquía, país con el que ya han mantenido una primera reunión. Este proyecto, el único español seleccionado, está siendo realizado por varios profesionales, entre los que figura Indagando TV.
¿Cómo surgió el proyecto AB-Bilgi?
A través de un consultor, que es amigo mío, habíamos empezado a pensar en la posibilidad de presentar proyectos. Salió una convocatoria que era específica para medios de comunicación y decidimos presentar un proyecto de cooperación de la Unión Europea para desarrollarlo con la sociedad civil y fundamentalmente con los periodistas de Turquía. En este trabajo tenemos que dar a conocer la Unión Europea y las posibilidades que ofrece a los ciudadanos y a los periodistas turcos, así como crear una red de periodistas turcos y europeos.
¿Por qué se desarrolla en Turquía?
Así se indicaba en la convocatoria que lanzó la Unión Europea y el Gobierno turco. Se trata de fondos europeos de un programa que se llama ‘EuropeAid’. Se trata de acercar todas las posibilidades a las que pueden optar en Turquía, aunque no pertenezcan a la Unión Europea, y que, además, conozcan todas las herramientas de cooperación. También consiste en establecer relaciones entre expertos en cooperación y periodistas y, a lo mejor, puede incluso haber oportunidades de trabajo dentro de la Unión Europea.
¿Cómo comenzó en AB-Bilgi?
Este proyecto me llega después de otro proyecto ‘Bioes2’, en el que también me encargué de las redes sociales y donde yo ya trabajé con el consultor. A partir de ahí, nos presentamos en esta nueva convocatoria.
¿Había participado en algún proyecto de este tipo?
Mi primer contacto con proyectos europeos fue en la Red de Desarrollo Rural con los programas Leader. Después directamente participé en el proyecto ‘Bioes2’, de desarrollo rural, de puesta en valor y de recursos naturales. Ahí sí que gestioné las redes sociales del proyecto, las notas de prensa y la parte de difusión del proyecto.
¿De dónde viene el nombre del proyecto?
Se llama AB Bilgi porque “AB” hace referencia a “Unión Europea” en turco y “bilgi” a información en turco.
¿Cómo va a ser su desarrollo?
Tiene una duración de quince meses. Este fin de semana pasado ha tenido lugar una primera reunión en Turquía con nuestro partner turco, que es la televisión llamada Destan TV. En este encuentro la directora de Indagando TV y el director técnico han presentado el proyecto y han conocido a los representantes institucionales.
El proyecto se configura en tres partes dirigidas a difusión y formación. Una primera parte consiste en formación sobre Europa para los periodistas turcos, que se impartirá en siete regiones de Turquía. En concreto tratarán las instituciones, los programas de financiación y las ayudas institucionales que existen. En segundo lugar se harán 10 programas de televisión para que conozcan proyectos que se han hecho con fondos europeos en distintas materias. Y la tercera parte es la comunicación, la difusión y la creación de una red de la que puedan formar parte periodistas y expertos. Esta red está basada en la comunicación 2.0. Para ello, vamos a utilizar una página web, que la estamos creando en este momento; y hemos creado un grupo abierto en Facebook. En Twitter también vamos a funcionar con unos hashtags que hemos creado y que hemos empezado a poner en marcha. Utilizaremos todas las herramientas de internet que nos ayudan a ponernos en contacto.
¿Qué acogida está teniendo entre los periodistas turcos?
De los diez proyectos elegidos, somos el único español. De momento la acogida ha sido muy buena. Ha habido mucho feedback y nos han transmitido cuáles son sus necesidades, qué les gustaría conocer, como por ejemplo las herramientas que tienen a su disposición, saber a qué tipos de proyectos pueden sumarse para ampliar su campo de trabajo…
¿Van a operar desde España o en Turquía?
Para grabar los programas de televisión nos vamos a apoyar en nuestro socio turco Destan TV y también los vamos a hacer desde Indagando TV. Además dos personas van a estar en Turquía durante varias semanas impartiendo toda la formación con los periodistas.
¿Todo el contenido se va a dirigir a los periodistas o alguno se destinará a los ciudadanos?
Aunque nuestro público principal van a ser los periodistas, nuestras sesiones estarán abiertas a representantes de distintas asociaciones y colectivos. En esto nos van a ayudar nuestros socios turcos y el Gobierno turco.
¿Qué idiomas utilizarán?
Vamos a trabajar en inglés y en turco. Uno de los consultores que participa en el proyecto sabe turco porque ya había trabajado con Turquía y Grecia. En Turquía el inglés no está implantado en algunas zonas. También nos moveremos con el español, que al fin y al cabo es nuestro idioma.
En concreto, ¿qué tareas desarrollará?
Me voy a encargar de todas las tareas relacionadas con el campo de la difusión, como las redes sociales, la página web, las notas de prensa, las relaciones con los periodistas. Y también trabajaré como apoyo a los programas de televisión.
¿Se va a difundir en España y en Europa?
Sí. En enero tenemos que viajar a Europa para tener una reunión con la dirección de comunicación de la Unión Europea y trabajar con ellos en Bruselas. Nosotros también queremos difundirlo en España, ya que es un proyecto español, y que podamos contar a los periodistas turcos lo que se ha hecho aquí desde que entramos en la Unión Europea. Para su difusión en Turquía se encargarán nuestros socios. Este es un proyecto internacional y, como tal, tenemos que lograr el mayor impacto posible a nivel internacional. Con las posibilidades que te ofrece hoy en día internet para difundir y contactar con periodistas, nos resultará más sencillo.
¿Qué social media plan va a realizar?
Pensamos que generar cuentas en redes sociales partiendo desde cero iba a ser mucho más complicado que trabajar con herramientas que ya teníamos creadas. Indagando TV tiene perfiles en las redes sociales y va a ser a través de ellos donde nos vamos a apoyar y crear toda la difusión. No vamos a crear cuentas propias en las redes sociales porque pensamos que es muy costoso y cuando alcanzas un nivel de difusión importante, el proyecto prácticamente está terminado. No queríamos que cuando el proyecto acabase, el trabajo muriese. Entonces si utilizamos las herramientas que ya tenemos creadas, podremos dar continuidad al proyecto, aunque haya acabado. De la otra manera si no hay fondos, ¿quién va a mantener esas cuentas? Por eso, además, decidimos crear un grupo abierto en Facebook donde todo el mundo pueda participar, enviaremos una newsletter, haremos entrevistas a periodistas, iremos contando quién es quién en la Unión Europea…
Hace unos meses escribió un artículo sobre sus inicios como autónoma en la web de la APA. ¿Cuál es su situación actual?
Al final es un cambio de mentalidad, otra manera de trabajar. Siempre había trabajado en empresas o en instituciones, bajo el paraguas que te aporta un contrato. Cuando me quedé en el paro, después de dar bastantes vueltas, vi que iba a ser más fácil trabajar por mi cuenta e intentar participar en diferentes proyectos que esperar a que alguien me contratara. Entonces me lancé a esa aventura. Al principio no es fácil, es un camino en el que de repente estás sola. Poco a poco en ese camino vas encontrando personas con las que vas colaborando en diferentes iniciativas. El proyecto europeo que hemos citado es el ejemplo de cómo diferentes personas nos hemos juntado, hemos presentado un proyecto, hemos realizado un trabajo previo muy duro, largo y complicado y lo hemos hecho de manera voluntaria. Estoy contenta con el resultado de ponerme a trabajar por mi cuenta. Me permite estar en contacto con muchos profesionales, hacer trabajos diferentes. Está siendo una etapa muy enriquecedora. Mi balance ahora mismo es muy positivo.
¿Lo recomendaría a periodistas que están en su misma situación?
Lo recomiendo porque finalmente el resultado ha sido positivo. Es fácil hablar de emprender, pero el camino no es nada fácil. A lo mejor has presentado un montón de proyectos, crees que alguno va a salir adelante y ese mismo día se te caen todos y te quedas a cero otra vez. Tienes que salir de nuevo a la calle a buscar proyectos a pensar en cosas, a moverte muchísimo. Hoy por hoy, como está el panorama, ha sido más fácil eso que seguir mandando currículos que nadie contestaba. Eso sí, trabajas todo el día, no hay fines de semana, da igual un lunes que un domingo, pero estás trabajando para ti y buscas proyectos que te pueden encajar. No es un camino fácil y nada sale a la primera. Desde que me di de alta de autónoma hasta que me salió un proyecto, pasaron nueve meses.
¿Algún consejo?.
No me atrevería a dar consejos. Si alguien me pregunta personalmente le contaré mi experiencia. Cada uno sabe sus circunstancias personales y profesionales, es muy difícil generalizar. Cuando alguien ha venido a preguntarme, yo cuento cómo me ha ido, en qué he fallado, qué errores he cometido… El consejo general que daría para los que buscan trabajo, es salir todos los días, hay que estar en los sitios, de todos te llevas algo. Sobre todo hay que ser muy activos y no tirar la toalla.
Como experta en información sanitaria, ¿qué errores y aciertos ha comprobado en la cobertura del ébola?
En un primer momento creo que se hizo muy mal, daba la impresión de que no se había preparado. Siempre digo que la comunicación no se puede improvisar, hay que prepararla. No sé si es que a lo mejor no pensaron que el ébola podía llegar a España y por eso no había una campaña con unas mínimas pautas. En la primera rueda de prensa con la entonces ministra de Sanidad, Ana Mato, se transmitía mucha inseguridad. Daba la impresión de que nadie sabía qué responder. A los ciudadanos les aportaron poca tranquilidad. Además había muchos portavoces. No sabías a quién representaban ni qué venían a decir. Creo que se puede poner como ejemplo de lo que no debe ser nunca la comunicación en una crisis y más en una crisis sanitaria. Es verdad que las crisis siempre llegan por sorpresa, pero en este caso sabíamos que había un brote. Deberían haberse preparado unas mínimas pautas. Después la situación se recondujo un poco cuando salían expertos en salud pública y en vigilancia epidemiológica. Daba la impresión de que era todo muy caótico.
¿Por qué quedan relegadas estas noticias ahora que el problema ya no está en España?
Al final siempre nos quedamos con lo más próximo y con la inmediatez, con la información del momento. Convertimos las puertas del hospital en un plató y era como que todo estaba invadido por el ébola. Aquí había un caso, y fíjate cuanta gente está muriendo en África. No solo sucede en esto, ocurre en más asuntos. Cuando ya no nos afecta directamente, es como que deja de interesarnos.
¿En qué situación ve el periodismo?
Como otros colectivos, el momento actual es muy duro y complicado. Es muy triste lo que le está pasando a la profesión, lo poco que se valora y cómo ha pagado la crisis de una manera tan brutal. El ciudadano necesita a los periodistas para saber todo lo que está ocurriendo. No sé cómo se va a recuperar la profesión porque el golpe ha sido muy fuerte. Es una profesión que me gusta mucho. Desde que era una niña he querido ser periodista, no quiero ser otra cosa. Creo que vale la pena luchar por conseguir lo que quieres, la profesión que tú quieres y lo importante que es contar bien las cosas. Siempre pienso que al ciudadano le va a llegar la actualidad, lo que pasa y lo que, por otro lado, se intenta ocultar a través de los periodistas. Ahí es muy importante que haya una buena formación. A veces trabajan en unas condiciones tan lamentables, mal pagados, y tantísimas horas de trabajo que es difícil exigir hacer las cosas con calidad, pero tenemos mucha responsabilidad, aunque el momento sea complicado.
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