La primera organización profesional española, que ha mantenido constante contacto con el Ministerio de Asuntos Exteriores para interesarse por la seguridad y estado de salud del fotógrafo, pide respeto hacia quienes trabajan por ofrecer información libre e independiente.
Artículo relacionado: La FAPE condena las agresiones sufridas por el fotoperiodista Guillem Valle